11 noviembre 2014
El
presidente de la
Asamblea Nacional Diosdado Cabello está muy preocupado porque
tenemos escuálidos infiltrados en los organismos como jefes, y porque tenemos
chavistas de la boca para afuera que son peores a veces que los propios
escuálidos, que maltratan al pueblo.
Entonces
es muy fácil deducir que votar por Chávez o Nicolás no te hace Chavista. Esto
lo sabe Diosdado desde que el Comandante Chávez llegó a Miraflores, pero es
ahora que se le nota más preocupado porque estamos a punto de perder el
gobierno. Hay quien dice que se trata de un show para levantar la moral del
pueblo chavista, bastante desmoralizado por cierto, pero no lo creo, creo
realmente que el compatriota Diosdado sí está preocupado.
Ya
varios camaradas le han respondido muy bien al Presidente de la Asamblea Nacional
por Aporrea.org, el portal de opinión más odiado por los chavistas de la boca
para afuera, pero quería agregar una breve reflexión.
Diosdado,
el antichavismo está presente en el mismo alto mando político y militar.
Chavista no es cualquiera. Ya sabemos que votar por Chávez o Nicolás no te hace
Chavista. Chavista es aquel que defiende el Plan de la Patria. Pero no solo
eso. Un Chavista con Ch mayúscula no le teme a que algún día el pueblo logre
organizarse en una sociedad sin clases, sin explotación, como lo soñaba el
Comandante Chávez en sus reflexiones. Entonces, ¿Cuántos Chavistas de verdad
hay en el Estado que toman decisiones y manejan presupuestos? Es lamentable,
pero son cuatro gatos. La mayoría no reconoce el Poder Popular mientras
disfruta de las mieles del poder en el Estado burgués.
De
hecho, los revolucionarios no solo son rechazados en la empresa privada, sino
también en el Estado. ¿Por qué? Bueno Diosdado porque quienes dirigen los
organismos del Estado y sus empresas son en su gran mayoría personas
consumistas que buscan ascender en la pirámide social, aunque voten por Chávez
o Nicolás, y es lógico que les incomode trabajar con revolucionarios. Lo
primero que hacen es inscribir a sus hijas e hijos en colegios privados para
que se relacionen con los opositores de los sectores medios y la burguesía, y
así poder elevar su estatus.
Dinero,
estatus y poder es lo más deseado por los chavistas de la boca para afuera. La
gran mayoría admira a los burgueses. Y no es cuento Diosdado. Haz un ejercicio.
Si tú le planteas de manera hipotética a cualquiera de ellas o ellos que si
tuvieran la oportunidad de pisar un botón que los pudiera convertir en un tris
en la persona de Lorenzo Mendoza, puedes estar seguro que todos te van a decir
que sí pisarían ese botón mágico. Te dirían: De bolas, qué pregunta tan
estúpida. Pero como esa posibilidad es inviable, al menos pueden disfrutar de
las mieles del poder en el Estado.
Claro,
están alienados. La gran debilidad de la revolución después de 15 años es la
falta de formación teórica e ideológica, la falta de compresión materialista de
la historia y de la realidad social, y de los valores socialistas. Y estamos
retrocediendo en esta tarea. Prueba de ello es que ahora tenemos una televisora
social TVES que transmite telebasura, pero esta vez con fondos públicos. Y para
más colmo de la mala suerte, José Vicente Rangel aplaudió la nueva
programación.[1] El 24 de octubre La Araña Feminista indignada se presentó a las
puertas del Minci para entregar un comunicado sobre la nueva TVES y casualmente
ningún medio del Estado cubrió esta acción de participación popular. Compatriota
Diosdado, creo que se la estamos poniendo muy difícil al pueblo organizado.
Entonces, ¿Cómo vamos a hacer una revolución así?
Debes
recordar cuando en un Aló Presidente, el 14 de marzo del 2010, desde Cumaná, el
Comandante Chávez preocupado por la falta de formación socialista de los candidatos
a diputados y de los militantes del PSUV, les hizo un llamado a estudiar
ciencia, a hacer cursos, y dijo que no puede haber un candidato ni un militante
que no se lea el Manifiesto Comunista: «Vamos a estudiar comadre, vamos a
interpretar la ciencia. Mire, aquí está el Manifiesto Comunista, y además este
libro reúne tres textos clásicos, no puede haber un candidato, es más, no puede
haber un militante del Partido Socialista, que no se lea este texto, estos tres
textos son, miren, primero el Manifiesto Comunista, segundo, Reforma o
Revolución de Rosa Luxemburgo; y tercero, El socialismo y el hombre en Cuba,
Ernesto Guevara».[2]
Bueno
hermano, tomando en cuenta las dificultades que estamos atravesando,
considero que tampoco puede haber un jefe en ninguna empresa ni institución del
Estado que no comprenda la concepción materialista de la historia y de la
realidad social como primer paso para comenzar un proceso lento de
desalienación y de cercanía con el pueblo. Saludos compatriota.
_________________
[2]
Chávez recomienda leer el libro Manifiesto: Tres textos clásicos para cambiar el mundo, con prefacio de Adrienne Rich, e introducción de Armando Hart, de la Editorial Ocean Sur, en su programa Aló Presidente 353, en la Empresa Mixta Socialista Pesquera Industrial del
Alba Pescalba. Cumaná, Estado Sucre. Domingo, 14 de marzo de 2010.
Publicado
en Aporrea.org el 11/11/14
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